VENTAJAS DE LEER A OREJUDO

Hace pocos días he visto en FILMIN (gran consuelo para confinados cinéfilos) la tremenda película Ventajas de viajar en tren (2019), una arriesgada apuesta dirigida por Aritz Moreno en tiempos de enorme corrección política. Magníficamente interpretada por Luis Tosar, Ernesto Alterio, Pilar Castro y Belén Cuesta, entre otros, traslada a la pantalla la no menos tremenda novela que, con ese título, Antonio Orejudo (Madrid 1963) publicara en 2000.

Orejudo dio su primer toque de atención en 1996 con Fabulosas narraciones por historias, y quienes lo descubrimos en Ventajas de viajar en tren, hemos tenido el placer, el honor diría yo, de disfrutar una voz verdaderamente fresca y potente en un panorama bastante desolador si seguimos las recomendaciones de círculos de amigos, tertulias y demás inventos mediáticos que se pasan el chicle para que, a base de dar la matraca, aburridos y mediocres intelectuales medren a cuenta de los lectores poco avisados.

Lo de Orejudo era, efectivamente, otra cosa. Tras sus dos aldabonazos iniciales, aparece en 2005 Reconstrucción, también extraordinaria y no volvió a editar más literatura hasta 2011, cuando aparece Un momento de descanso, con algún leve síntoma de agotamiento.

Confieso que no sé nada de su última obra, Los cinco y yo (2017) y he visto que El País está publicando entregas de otro texto para amenizar la cuarentena.

Para la cuarentena tengo cantidad de cosas pendientes y no sé si estos tiempos serán los más apropiados para entrar en el mundo del primer Orejudo. Lo que sí digo es que, cuando podamos ir a la playa o al monte, esas tres novelas son algo tan serio como recomendable.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio web utiliza cookies de terceros para optimizar tu navegación, adaptarse a tus preferencias y realizar labores analíticas. Al continuar navegando aceptas nuestra Política de cookies. ACEPTAR
Aviso de cookies